La filòsofa i professora Luisa Muraro (“Margarita Porete, lectora de la Biblia sobre el tema de la salvación“) va posar nom a una regla hermenèutica que permet entendre que la invisibilització de la dona es produeix en el codis socials i culturals, no a la realitat, on la dona hi és i ha fet, en moltes ocasions, molta més feina.
Cuando reflexionamos sobre la ausencia o sobre la escasa presencia femenina en la historia documentada, tendriamos que recordar siempre que esto vale más para la representación de las cosas que para las cosas representadas, más para las mediaciones que para la realidad que hay que mediar, más para los códigos culturales que para la cultura que estos intentan interpretar.
La regla hermenèutica es denominada per Luisa Muraro: “Llei de Lina Vannucci”.
Es el nombre de una mujer que organizó un acto para apoyar, en sus comienzos, la campaña electoral de uno que quizá esté destinado a llegar a ser el jefe del gobierno de mi país. En la única y breve noticia periodística de ese acto, salieron los nombres de unos y de otros, pero no el suyo.
Este hecho me pareció esclarecedor.